DESNUDEZ
DESNUDEZ
Se necesita un ambiente muy intimo para poder esculpir con luz, la desnudez de una mujer
Saira
Andrea Balles
Laura Monroy
Creo que tengo la capacidad de plasmar en un disparo, en una fotografía, lo que mis ojos ven en una mujer. Trato de mostrarla como ella jamás se ha visto, trato de descubrir esa sensualidad y erotismo que toda mujer tiene en su interior; haciéndolas únicas, bellas y hermosas.
Con el pasar de los años, he ido creando mi propio estilo.
Una escritura pintada con luz que refleja la belleza y el alma erótica de cada modelo dirigiéndola según mi fantasía. “Probemos esto, hagamos aquello”, escojo la luz, determino la posición, elijo el ángulo y simplemente le hablo y le digo lo que quiero ver, dejando que todo fluya.
Siempre he creído que debe existir mucha comunicación, confianza y complicidad con la modelo, pues el éxito de una sesión, para unas increíbles fotografías, también dependen de la modelo. No se trata de fotografiar una mujer bonita, la belleza, por si sola, no hace que una mujer resulte interesante; se trata, de descubrir su interior, su actitud y plasmarlo ante mi cámara. La actitud hace la belleza.
Vanessa Simonelli
Juego con la luz buscando ambientes que me agraden y también cambio la técnica, muchas veces y en su mayoría llegando a la sencillez, a lo esencial, una ventana, la luz de una vela o un bombillo.
Un desnudo fotográfico, debe tener personalidad, contar una historia, despertar emociones, en algunos casos trasgredir, es la transformación y la extracción de lo intimo en una forma de escultura viviente tallada con luz.
La belleza de un desnudo hay que entenderlo, contemplarlo y admirarlo; pues es una perfecta geografía y geometría de la creación. Aquí el tema no es la carne, si no, los ojos que ven esa carne.
Una mujer desnuda frente a mi cámara, es una mujer que no se esconde, que se ama a si misma, y que se entrega en total confianza. Es algo que valoro mucho. La confianza no se puede quebrantar, arruinaría todo. Sólo dejo que ella abra su alma y me muestre su interior, su parte más íntima.
Ya todo lo demás, son secretos que un mago de la luz no puede revelar.
Conoce un poco más de CARLOS ESGUERRA
Nací en el año de 1977 en la ciudad de Bogotá, estudié publicidad en la Universidad de Bogotá Jorge Tadeo Lozano y trabajé como copywriter (creativo), en grandes agencias de publicidad como Y&R y Ogilvy & Mather. Actualmente tengo mi propia empresa, una agencia de publicidad Dynamita.
¿Cómo comenzó todo con la fotografía? Fue por pura casualidad, realice un trabajo fotográfico para una banda de Rock y ahí comenzó todo. Me sentía atraído por la sensualidad y el erotismo, a finales del año 2014 tome un taller de Fotografía Provocativa, ese taller abrió mis ojos y mi mente. Ahora es el erotismo, la sensualidad y el boudoir lo que me gusta fotografiar hacer parte de mi alma como artista de la luz.
Mis fotos han sido publicadas en la Revista Don Juan, Soho (digital), en la prestigiosa Revista GQ (México) y en otras revistas. También realice unas fotografías como gestor ambiental fotográfico que salieron publicadas en el libro “Soñando Territorio II” de la CAR.
